Síntomas del SOP

El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es descrito como un síndrome y no una enfermedad, ya que se presenta como un conjunto de signos y síntomas que pueden ocurrir en cualquier combinación. Éstos son algunos de los síntomas del síndrome de ovario poliquístico:

  • Anormal ciclo menstrual: Cuando usted tiene síndrome de ovario poliquístico, sus períodos pueden ser más pesado, más ligero, irregular o ausente por completo. Sin embargo, usted puede tener periodos completamente normales y todavía tienen SOP.

  • Aumento de peso: En mujeres con PCOS, aumento de peso se debe principalmente a altos niveles de insulina circulantes en la sangre. Las células normalmente absorben la glucosa con la ayuda de la insulina. Cuando las células no responden normalmente a la insulina, su cuerpo produce más insulina, al " la fuerza " las células en respuesta. Cuando los niveles de insulina suben, otros cambios hormonales pueden conducir a un aumento del apetito y disminución de la quema de grasa, que conducen al aumento de peso.

  • El acné y la piel grasa: Las mujeres con SOP tienden a tener niveles más altos de andrógenos (hormonas masculinas), que causan el acné y aumento de la oleosidad de la piel.

  • Crecimiento excesivo de vello: Su cuerpo puede ser más peludo en ciertos lugares (como el pecho, los muslos, la cara y la espalda), un efecto secundario de los andrógenos.

  • Perdida de cabello: El pelo en la cabeza puede adelgazar si tiene síndrome de ovario poliquístico, otro efecto secundario de los niveles de andrógenos más altos.

  • Problemas de sueño y fatiga o cansancio: Estos síntomas pueden ser debido a la fluctuación de los niveles hormonales y aumento de la ansiedad.

  • Depresión, ansiedad, irritabilidad, y cambios de humor: Estos síntomas se deben probablemente a los niveles hormonales alterados.

  • Los problemas de fertilidad: Los desequilibrios hormonales que vienen con SOP pueden interrumpir la ovulación.

  • Síndrome metabólico: También conocido como síndrome X, síndrome metabólico es un conjunto de síntomas, incluyendo resistencia a la insulina (donde la insulina producida por el cuerpo no funciona de manera eficiente), presión arterial alta y el colesterol alto. Puede conducir a la diabetes y enfermedades del corazón.